Su origen se explica debido a un extenso viaje de sus padres por Europa.
La historia cuenta que cuando tenía tan sólo tres años los padres del artista se embarcaron en un viaje por Europa, quedando al cuidado de su abuela materna y un gran contingente de niñeras.
Cuenta la madre, Carmen Moreno, a Rolling Stone que Charly «nunca me perdonó ese viaje. Fueron muchos días y él nos extrañó tanto que le agarró vitíligo. Es el día de hoy que me acuerdo y me arrepiento».
En efecto, Charly no era el mismo: esa tarde, cuando regresaron a su hogar, Carmen y Carlos vieron cómo su pequeño hijo presentaba unas manchas blancas esparcidas por el lado derecho de su rostro.
Extrañó tanto a sus padres, que todo derivó en una crisis nerviosa y, en consecuencia, en el problema de pigmentación que es el vitíligo.
El propio García lo confirmaría años más tarde en una entrevista. «¿Por qué tengo el bigote bicolor? Porque mamá y papá se fueron muy lejos. Los extrañé mucho y así me salió el bigote. No fue antojo, fue un extrañar», aseguró.