El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, apuntó a «recuperar los salarios».
El Gobierno aseguró este sábado que el objetivo es que en la nueva negociación de septiembre por el Salario Mínimo Vital y Móvil se aplique un reajuste en línea con «una realidad más cercana a la inflación» o lo que «están negociando en el resto de los convenios».
Así lo indicó el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, quien apuntó: «Tenemos que recuperar los salarios».
La administración de Alberto Fernández formalizó a principios de julio el adelanto de los incrementos en el salario mínimo, el cual estableció que el ingreso pasó a $27.216 a partir de ese mes, a $28.080 en agosto y completará el aumento del 35% en septiembre, con un nivel de $29.160.
Los $29.160 de ingreso mínimo que estaban previstos para febrero del año próximo se adelantaron a septiembre de 2021, mes en el que estaba previsto el pago de $27.000, es decir de un aumento del 8%.
«El objetivo es en la nueva negociación de septiembre reajustar el número final que habíamos pactado para el salario», indicó Moroni en declaraciones radiales.
De ese modo, aseguró que la intención es poner en línea esa suba con «una realidad más cercana a la inflación o lo que se está negociando en el resto de los convenios».
Al remarcar la necesidad de que el poder adquisitivo logre una recuperación, puntualizó: «Esperamos también con el salario mínimo cumplir con ese objetivo».
El funcionario nacional subrayó que su gestión busca que en septiembre se pueda alcanzar un aumento importante para el salario mínimo: «Es a lo que apuntamos».
Además, consideró que «el salario mínimo es una paritaria bien compleja porque tiene 32 miembros».
«Hasta en logística es compleja», insistió y precisó que «hay 16 representantes del sector patronal de distintas cámaras y participan 16 representantes de los trabajadores».
«Es una paritaria interesante», manifestó Moroni, quien analizó: «Pasamos el peor año de la historia argentina el año pasado y tuvimos muy baja conflictividad».
Con relación a los cierres paritarios de los gremios en general, que parten de un piso del 40 por ciento, señaló: «Nos parece que es un rango que puede estar en el orden al objetivo que estamos apuntando». .
Por otro lado, el ministro evaluó que «la recuperación en la Argentina es bastante heterogénea», pero confió: «A medida que aflojan las restricciones, pensamos que vamos a mejorar».